Me dejó por no querer tener sexo

Hace una semana me dejó mi novio porque él se sentía frustrado sexualmente, ya que en todos estos meses de relación no quise tener intimidad con él. Me parece muy irónico porque cuando nos conocimos, yo le dejé en claro que tenía nulo interés en una relación sexual y que lo nuestro seria plenamente afectivo, y que si no estaba de acuerdo con eso, podía irse. Yo soy virgen y no planeo dejar de serlo con nadie. En un punto le agarré indiferencia al sexo, que más tarde tras la insinuación de mi padre (No preguntar por favor) se volvería aversión a este mismo, así que entré en un celibato voluntario y que sinceramente, no sé si algún día llegaré a dejar. Sé que no es la norma, y a nuestras edades las hormonas están que vuelan, así que supuse que tarde o temprano él me pediría eso, por eso se lo aclaré y le di la libertad de marcharse desde el inicio.

Cuando empezó nuestra relación él no tenía problema con mi negación a intimar, pero con el tiempo empezó a manifestar ira y mosqueo cada vez que yo me mostraba reacia a tener algo con él. Muchas veces él me confesó que se sentía inseguro, como si no le deseara, porque yo le había dicho que esperaba que con él sintiera ese deseo sexual que perdí justo cuando más se manifiesta, que con él podría sentir esa sensación placentera que todo el mundo ama. Aunque intenté explicarle mis sentimientos, no lo entendía y empecé a notarle raro: ya no era tan cariñoso y atento, cada vez inventaba más excusas cada vez que le proponía salir, hasta que al final la semana pasada me terminó. Me dijo de quedar en una amistad, pero yo no puedo ser su amiga, así que salí de su vida.

Me siento muy insegura respecto a mi propio cuerpo. No entiendo porque incluso con una persona que amo, no era capaz de encender esa chispa de deseo, de dejar el trauma de lado para dar paso a una experiencia que todo el mundo habla como única. Siento que fueron estas mismas inseguridades las que provocaron que él huyese de mí: yo le plasmé la idea de que él sería capaz de arreglarme, y como no pudo, creo que al final el más dañado aquí fue él.